sábado, 11 de diciembre de 2010

Milhojas con sabayón de naranja

El milhojas es una receta que permite infinitas reinterpretaciones. La propuesta que nos hace la autora Tessa Kiros fusiona la masa filo con un delicioso sabayón perfumado. Sin duda, una combinación infalible.




Procedencia:  Falling Cloudberries de Tessa Kiros


Ingredientes:

3 planchas de masa filo
60 g mantequilla derretida
30 g azúcar
3 c.s. miel

Para el sabayón:
1 c.c. (5 g) gelatina neutra en polvo + 20 g agua fría
1 huevo + 2 yemas
50 g azúcar
1 c.s. mermelada de naranja amarga
½ c.c. agua de azahar
300 g nata para montar bien fría
azúcar glas para espolvorear

Elaboración:

Para hacer el hojaldre, precalentamos el horno a 180ºC. Forramos una bandeja plana de horno con papel vegetal. Colocamos una hoja de masa filo sobre la bandeja. Pincelamos la hoja con mantequilla derretida y la espolvoreamos con la mitad del azúcar. Sobre ella colocamos otra hoja de masa y repetimos la operación. Sobre ella colocamos la última hoja de masa y la pincelamos con mantequilla. Con un cuchillo afilado, cortamos las hojas en 32 trozos parejos. Dibujamos unas líneas de miel a todo lo largo. Horneamos durante 7-10 minutos hasta que el hojaldre tome un bonito color dorado. Sacamos del horno y dejamos enfriar en la bandeja, asegurándonos de que las planchas de hojaldre no se hayan pegado entre sí.

Para hacer el sabayón, en un bol montamos la nata con las varillas eléctricas. Reservamos en el frigorífico. En un bol pequeño mezclamos la gelatina en polvo con el agua fría. Movemos bien para que no se formen grumos. Colocamos un cazo de baño maría con las dos yemas y el huevo sobre una cacerola con agua hirviendo a fuego medio-suave. Batimos con las varillas eléctricas unos segundos hasta que se deshagan. Incorporamos el azúcar. Batimos durante al menos 10 minutos. Veremos que vamos obteniendo una mezcla cada vez más blanca y espesa. Añadimos la mermelada de naranja y el agua de azahar. Batimos hasta que queden bien incorporados. Fuera del fuego, añadimos la gelatina y batimos hasta que queden bien incorporada. Sacamos la nata del frigorífico y volcamos sobre ella la crema de huevo. Trabajamos con cuidado con una espátula haciendo movimientos envolventes. Dejamos enfriar el sabayón en el frigorífico hasta que vaya a utilizarse.

Para emplatar, colocamos una plancha de hojaldre en el plato. Sobre ella ponemos una buena cucharada de sabayón —o bien introducimos el sabayón en una manga pastelera y aplicamos la crema con una boquilla ancha — y colocamos encima otra plancha de hojaldre. Repetimos la operación (puede incluso ponerse una tercera capa). Espolvoreamos con un poco de azúcar glas.


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2 comentarios:

  1. ¡¡¡¡¡¡Me quedo con esta receta!!!!!Me parece exquisita.

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  2. A mí también me lo parece :-) Además esta receta admite mil variantes, ya que puedes jugar con el sabor de la mermelada. También es posible sustituir la mermelada por un sirope o cacao en polvo. Concretamente, en una ocasión hice una milhoja con sabayón de té Matcha y el resultado fue impresionante!!!

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